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Agua Prieta, son.- Hasta hace poco, la venta de ropa de segunda, se veía solamente los fines de semana acá en Agua Prieta.
Pocas empresas dan trabajo a estos amplios segmentos de la población
Javier Mercado Velderráin

Algunas familias lo agarraban incluso “de cura”, como dicen los muchachos.
Ahora estos “negocios” han proliferado por toda la ciudad y muchos trabajan de Domingo a Domingo.
Mercado Político ha hecho visitas en algunos puntos, y entrevistado a los encargados.
La mayoría son personas de una edad superior a los 45 años.
Hay señoras de hasta 75 años vendiendo lo que pueden, pero sobresale la venta de ropa usada.
Hombres también ya maduros, ofrecen herramientas, llantas, equipos diversos para trabajos de construcción, de todo lo que consiguen con sus “colegas” de ciudades como Phoenix y Tucson.
“Hemos visto, al menos yo, en este trabajo una opción para hacerme de dinero, porque en ningún lado nos dan chamba, y las necesidades son de todos los días”, comentó Don Rubén, instalado sobre la calle 35 en un viejo pickup.
También Doña Marta, ubicada por la avenida 18, indica que “Gracias a Dios que mis hijos me apoyan con ropa, herramienta, y todo lo que pueden, ellos viven en Tucson y así me ayudan, tengo este trabajito”, dijo.
La verdad detrás de toda esta dinámica “comercial”, es que en Agua Prieta el empleo es escaso, el que hay es mal pagado, y para la gente que supera los 45 años, las oportunidades no existe.
Por eso muchos optan por vender cosas usadas, es lo que tienen.